sábado, 16 de agosto de 2008

Rusia interna sus tropas en Georgia pese a firmar el plan de paz.

Rusia interna sus tropas en Georgia pese a firmar el plan de paz
Hace 7 horas
TIFLIS (AFP) — El presidente ruso, Dimitri Medvedev, firmó este sábado el plan de paz con Georgia, pero sus tropas reforzaban sus posiciones y se adentraban en territorio georgiano para apostarse a unos 30 km de Tiflis.
Los blindados y tanques rusos seguían bloqueando la entrada principal a Gori (centro), un enclave estratégico situado a 60 km de la capital y cerca de Osetia del Sur, desencadenante del conflicto, constató el sábado por la mañana un fotógrafo de la AFP.
Además un reportero de la AFP presenció movimientos de tanques y de vehículos blindados de infantería, armados con cañones de 30 mm, cerca de Igoyeti, a unos 30 km de Tiflis.
Se desconoce el motivo de los desplazamientos de estas fuerzas, que el viernes habían abandonado Gori para adentrarse todavía más en territorio georgiano.
Y eso que Medvedev suscribió el sábado el plan de seis puntos negociado por la presidencia francesa de la Unión Europea (UE) para poner fin a los combates en Georgia, anunció el Kremlin.
El presidente georgiano Mijail Saakashvili ya estampó su firma el viernes en este acuerdo.
Las condiciones para que las fuerzas rusas garanticen su seguridad hasta la puesta en marcha de un mecanismo internacional fueron negociadas al milímetro entre Estados Unidos, Francia y Rusia. La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, comunicó el viernes a Tiflis los detalles, que se desconocen públicamente.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, consideró que la firma del acuerdo por Rusia era un "paso alentador", aunque advirtió que las regiones separatistas prorrusas de Osetia del Sur y Abjasia deben seguir formando parte de territorio georgiano.
"Ahora Rusia debe honrar el acuerdo y retirar sus fuerzas", advirtió.
Rice insistió en que el ejército ruso debía "iniciar el retiro de forma inmediata" de las tropas que entraron a Georgia después de que los georgianos intentaran en vano, el 7 de agosto, tomar el control de Osetia del Sur.
Lo mismo estimó Gran Bretaña y Alemania insistió una vez más en mantener la integridad territorial de Georgia.
Pero el canciller ruso, Serguei Lavrov, declaró que las fuerzas rusas permanecerán "el tiempo que sea necesario" en Georgia y se retirarán a medida que se despliegue el contingente de paz ruso previsto en el acuerdo.
Según una carta que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, envió a su homólogo georgiano para aclarar el alcance del acuerdo, las fuerzas rusas de mantenimiento de la paz podrán estar "en una zona de varios kilómetros de amplitud desde el límite administrativo entre Osetia del Sur y el resto de Georgia".
Sobre el terreno, el sábado por la tarde la retirada de las fuerzas rusas no parecía inminente.
La carretera que une Tiflis y Gori estaba abierta a la circulación aunque unos cuantos soldados rusos cavaban trincheras en sus inmediaciones, cerca de Igoyeti.
El ministerio del Interior de Georgia denunció a la AFP otros movimientos de tropas que también se habrían posicionado en Katchuri y Ajalgori, al noreste de Gori.
Desde el viernes se permite la entrada con cuentagotas de convoyes humanitarios y ambulancias en Gori, donde se ignora el número de heridos o muertos.
La canciller alemana, Angela Merkel, viajará el domingo a Tiflis. El presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Jacob Kellenberger, está previsto que viaje el mismo día para evaluar el impacto humanitario del conflicto.
En paralelo, una misión de cuatro expertos viajó al país para proporcionar a la UE un balance de la situación humanitaria.
El conflicto ruso-georgiano estalló después de que Tiflis lanzara una ofensiva el 7 de agosto por la noche contra los separatistas prorrusos de Osetia del Sur. Las fuerzas rusas contraatacaron, haciendo retroceder al ejército georgiano hasta tomar posiciones en Georgia.
Las autoridades georgianas pusieron al día el balance de bajas en sus filas y entre la población civil: 182 muertos, entre ellos 115 soldados, y 479 heridos.