viernes, 3 de enero de 2014

La primera tormenta invernal de 2014 castiga a Nueva York pero no la paraliza


Un tramo de la Quinta Avenida de Nueva York el viernes tras el paso de la primera tormenta invernal 2014.

El fenómeno meteorológico golpea 22 estados y afecta a 100 millones de personas.





La primera tormenta invernal del 2014 afecta a Nueva York pero no la paraliza. La ciudad amaneció el viernes con menos nieve de lo pronosticado y un frío intenso. A primera hora cuadrillas de trabajadores municipales salieron a despejar las principales calles y avenidas con palas mecánicas y camiones con sal para evitarla formación de hielo.




Las autoridades levantarán el estado de emergencia pasado el medio día mientras la tormenta se desplaza rumbo al noroeste. Las clases fueron suspendidas.



Las acumulaciones de nieve han sido desiguales en el estado. Oscilan entre los 7,5 centímetros en el aeropuerto Kennedy hasta los 30 en algunas zonas de Queens, Brooklyn o El Bronx, mientras que en Central Park (Manhattan) se midieron 16 centímetros, reportó la agencia española de noticias Efe.

“Agencias locales pusieron en marcha un operativo para recoger a personas sin hogar.”

Los pronósticos señalaban que en el norte del estado caerían al menos 30 centímetros de nieve.



La sede de las Naciones Unidas y los tribunales federales también permanecen cerrados.



La red de transporte público funciona con algunos retrasos, pero sin graves trastornos, mientras que la circulación de vehículos se hace con lentitud y hay mucho menos tráfico en las calles.



La mayoría de los negocios de Manhattan abrieron el viernes al igual que los mercados financieros y las sedes de los grandes bancos y corporaciones.



El nuevo alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, ha sido visto apaleando la nieve acumulada a la puerta de su vivienda de Park Slope (Brooklyn) antes de dirigirse al Ayuntamiento para supervisar las operaciones de los trabajadores municipales.

Las tormentas de nieve han hecho tambalear a varios alcaldes por la respuesta de sus administraciones a este tipo de fenómenos climáticos.



"Los neoyorquinos deben ser extremadamente cuidadosos al salir", dijo De Blasio en una declaración, en la que añadió que "lo mejor que se puede hacer es estar fuera de las carreteras para que podamos limpiarlas lo antes posible y atender a los vecinos más ancianos o vulnerables".
Temperaturas gélidas



Intensas nevadas, fuertes vientos y un frío glacial deja a su paso la primera tormenta invernal 2014 que azota el noreste de Estados Unidos.



Las mediciones revelan vientos helados superiores a los 50 kilómetros por hora, temperaturas de hasta 12 grados bajo cero y una sensación térmica que podría llegar a -23° Celsius.



El jueves por la noche más de 2,200 vuelos habían sido cancelados, de acuerdo con datos del sistema de seguimiento de viajes aéreos FlightAware.



La zona de impacto de la tormenta va desde Chicago hasta el norte de Massachusetts y Canadá.



Más de 450 distribuidores de sal para derretir el hielo se colocaron en la madrugada del jueves y unos 1,700 camiones estaban preparados para barrer la nieve de las calles de Nueva York.



Las autoridades han advertido que los trabajos de despeje en calles, avenidas y carreteras tomará un tiempo, será difícil y pidieron paciencia, reportó el diario The New York Times.
 
El jueves en Nueva Jersey el gobernador Chris Christie declaró el estado de emergencia, al igual que Nueva York, para enfrentar la emergencia con mejores recursos.



Las autoridades también advirtieron sobre el riesgo de congelación o hipotermia debido al intenso frío esperado.



En Boston, donde se pronostica para este viernes una fuerte nevada y se espera que las temperaturas caigan a 21 grados bajo cero, las escuelas y las oficinas estatales permanecerán cerradas.



En algunas partes de Massachusetts se esperaban hasta 60 centímetros de nieve y el gobernador Deval Patrick anunció el cierre de la administración pública estatal este viernes, pidiendo al sector privado hacer lo mismo.
Frío intenso



En Massachusetts se registró una acumulación de más de medio metro, temperaturas que alcanzaron -30° Celsius en Illinois y vientos de más de 60 kilómetros en las zonas costeras de Long Island, reportó la agencia Notimex. Esta combinación creó condiciones peligrosas para el transporte y múltiples accidentes, sin que se reporten víctimas fatales por ahora.



Autoridades recomendaron a la población permanecer en sus hogares toda vez que el nivel de frío y el viento pueden ocasionar el congelamiento de las partes expuestas del cuerpo en menos de 10 minutos.



En Boston, agencias locales pusieron en marcha un operativo para recoger a personas sin hogar y trasladarlas a albergues de la ciudad.



Los principales aeropuertos de la zona fueron cerrados desde la noche del jueves, lo que ocasionó un efecto dominó en la posposición del tráfico aéreo en la mayor parte del país con más de 6 mil demoras incluidas 2,100 cancelaciones hasta el momento y otras mil 500 el viernes.



En el aeropuerto O'Hare de Chicago, uno de los principales del medio oste de Estados Unidos, se cancelaron más de 600 vuelos.



En el metropolitano de Washington fueron cerrados la mayor parte de los sistemas escolares luego que las autoridades pusieron en marcha una alerta por frío hasta el mediodía del viernes.



Amtrak, el servicio de trenes que opera en el corredor del noreste, notificó de posibles retrasos a partir de este viernes. En Nueva Inglaterra, la región del noreste que incluye Massachusetts, Vermont, Rhode Island, Maine y Connecticut, las autoridades pidieron a la población estar alerta ante la posibilidad de inundaciones costeras, reportó la agencia.