lunes, 28 de octubre de 2013

OBAMA BUSCA COMO APACIGUAR A EUROPA SOBRE EL ESPIONAJE.

EE.UU. tenía en 2010 equipos de inteligencia en Madrid y otras 18 capitales europeas.

La Casa Blanca está constatando que no logra acallar las críticas europeas por los programas de vigilancia desplegados por la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense y ha comenzado a examinar si existe alguna salida de compromiso que, manteniendo prácticamente invariable el alcance del espionaje, logre contentar a los aliados europeos. No hay día que pase sin que aparezca alguna nueva revelación sobre el espionaje masivo.
Ayer, el semanario «Der Spiegel» informó de que la CIA y la NSA contaba en 2010 con unos ochenta equipos de espionaje en todo el mundo, 19 de ellos en ciudades europeas como Madrid, Berlín, París, Roma, Praga y Ginebra.
Y esta vez, a diferencia de las quejas genéricas expresadas hace semanas, Alemania y Francia se han unido para exigir una mayor coordinación de inteligencia entre la NSA y los servicios de espionaje europeos. El objetivo pasaría por que algunos de esos servicios queden incluidos en una comunidad de inteligencia como la que constituye el grupo de «Los Cinco Ojos», integrado por los servicios de espionaje de EE.UU., Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, que comparten datos y se comprometen a no espiar a sus respectivos países.
Alemania, que mañana envía una delegación especial a Washington, podría utilizar como presión la iniciativa que está coordinando con Brasil en las Naciones Unidas. Ambos países estudian elevar el próximo mes a la Asamblea General de la ONU una resolución para fortalecer internacionalmente la privacidad de internet.

Excusas

«The New York Times» advertía ayer en su portada de que la respuesta que ha estado dando Washington hasta ahora –insistir en que todos los países se espían, lo que ocurre es que Estados Unidos tiene más medios para hacerlo– probablemente ya no basta. «En el embrollo del espionaje, el que todo el mundo espía ya no basta», era uno de sus titulares.
El director de la NSA, el general Keith Alexander, dejó abierta la puerta a llevar a cabo algunas modificaciones en los programas, aunque indicó que tal tarea es competencia de la Casa Blanca y del Congreso. De todos modos, advirtió que tampoco existe mucho margen para la reforma. «Hay decisiones políticas que deben tomar los políticos, pero nadie jamás querrá que dejemos de proteger este país de ataques terroristas, contra Estados enemigos o contra ciberataques», declaró el general.
Alexander apremió a la Administración a lograr detener la difusión de los documentos sustraídos por Edward Snowden, ya que el contenido de los mismos pueden dañar la seguridad nacional. «Tenemos que conseguir un modo de parar esto. No sé cómo. Eso es algo que corresponde más a la Justicia y a los políticos, pero desde mi perspectiva, es equivocado dejar que esto siga así», manifestó.
Además de representantes alemanes, también varios miembros de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos Internos del Parlamento Europeo se desplazarán este lunes a Washington para abordar con las autoridades estadounidenses los programas de vigilancia de la NSA.
(Fuente:  http://www.abc.es/comunidad-valencia/20131027/abcp-obama-busca-como-apaciguara-20131027.html  y selección de Patric)

jueves, 17 de octubre de 2013

Barack Obama: "Si no les gusta una política, ganen las elecciones pero no rompan el gobierno"

El presidente dio su primera conferencia de prensa desde que terminó la parálisis administrativa en Estados Unidos y dijo que "generó un daño innecesario en la economía"


WASHINGTON.- El presidente Barack Obama dio su primer discurso desde que el Congreso aprobó, a contrarreloj, los proyectos de presupuesto y de aumento del techo de la deuda, después de 16 días de parálisis administración y una fuerte amenaza de default.
"Porque los demócratas y republicanos responsables se unieron, la primera parálisis administrativa en 17 años ya terminó", formalizó Obama.
"¿No les gusta una política particular o un presidente en particular? Entonces expongan su posición, ganen una elección, pero no rompas el gobierno", dijo el mandatario en una conferencia de prensa.
"No hay ganadores acá. Estas últimas semanas han provocado un daño innecesario a nuestra economía", dijo Obama y admitió que "los estadounidenses están completamente cansados de Washington".
Obama lanzó un llamado al ala dura del Partido Republicano del Congreso a unirse para aprobar un proyecto de ley de presupuesto de largo plazo y dejar de lado sus diferencias que amenazan la economía y su credibilidad ante los estadounidenses.
Once horas después de aprobar el texto que permitió a Estados Unidos evitar el riesgo de undefault y reabrir servicios públicos luego de 16 días de parálisis, el mandatario urgió al Congreso y específicamente a sus rivales republicanos a avanzar en leyes estancadas sobre agricultura y la reforma migratoria.
"No hay razones por las que no podamos gobernar de manera responsable pese a nuestras diferencias, sin tener que tambalearnos de crisis en crisis, todas fabricadas", aseveró Obama.
"Trabajemos juntos para que el gobierno trabaje mejor, en lugar de tratarlo como el enemigo y hacer adrede que trabaje peor", pidió a los republicanos. "Venimos de diferentes partidos, pero Estados Unidos está primero. No podemos guiarnos por el odio", agregó.
"Los deseos y sueños de los estadounidenses es lo que importa, no los nuestros. Esto nos obliga a cooperar y negociar y actuar en beneficio de nuestra nación, una nación", subrayó.
Además, el mandatario envió un mensaje a los cientos de miles de empleados federales que debieron tomarse vacaciones sin goce de sueldo forzadas por la parálisis. "Gracias por su servicio. Bienvenidos de vuelta. Lo que ustedes hacen es importante. No permitan que nadie diga algo distinto", dijo.

"NOS VAMOS A RECUPERAR"

El mandatario subrayó que a pesar de los efectos de la crisis de las últimas semanas sobre el déficit de Estados Unidos y otros parámetros de su economía, el país se va a recuperar.
"Estados Unidos es el cimiento de la economía global por una razón: somos la nación indispensable a la que el resto del mundo mira como el lugar más seguro y fiable para invertir", dijo.
"Nos hemos ganado esta responsabilidad durante más de dos siglos porque mantenemos nuestra palabra y cumplimos nuestras obligaciones, eso es lo que significa total confianza y crédito completo, que pueden contar con nosotros", destacó. "Y hoy quiero que nuestra gente, nuestras empreas y el resto del mundo sepan que la total confianza y crédito en Estados Unidos sigue siendo incuestionable", agregó.
Obama mencionó además el efecto de la crisis sobre la imagen internacional del país. "Probablemente nada dañó más la credibilidad de Estados Unidos en el mundo, nuestro prestigio ante otros países, que el espectáculo que vimos en las últimas semanas", dijo.
"Eso alentó a nuestros enemigos, fortaleció a nuestros competidores y desilusionó a nuestros amigos que nos demandan un firme liderazgo", concluyó.

QUÉ PASÓ

Luego de exigir durante dos semanas concesiones y recortes sobre los gastos en programas sociales, los republicanos en la Cámara de Representantes, con su presidente John Boehner a la cabeza, aceptaron que habían perdido y desbloquearon el acuerdo alcanzado por el Senado, que fue promulgado en ley por Obama anoche.
Se trata sin embargo de una salida provisoria: el techo de la deuda fue subido hasta el 7 de febrero de 2014 y la ley de presupuesto estará vigente hasta el 15 de enero. Antes de esas fechas, los dos bandos deberán buscar nuevos acuerdos sobre los mismos temas.
Una comisión bicameral será convocada, según la ley aprobada, para elaborar antes del 13 de diciembre un presupuesto para el resto del año fiscal 2014.
Un mecanismo similar de "supercomisión" no logró acordar en 2011 y el resultado fueron recortes de gasto público que todavía están vigentes.
(Fuente:  Agencias Reuters, DPA y AFP  - y selección de Patric  -  http://www.lanacion.com.ar/1629917-obama-si-no-les-gusta-una-politica-ganen-las-elecciones-pero-no-rompan-el-gobierno       )

martes, 1 de octubre de 2013

Cierre del gobierno de EE.UU.: cómo afecta en las oficinas públicas

El cierre obligará a mandar a casa a más de 800.000 de los 2,1 millones de funcionarios federales durante el tiempo que dure la escasez de fondos.



La falta de acuerdo presupuestario entre republicanos y demócratas ha empujado a Estados Unidos al primer cierre parcial del Gobierno en más de 17 años, un fenómeno que continuará hasta que el Congreso apruebe nuevos fondos.
El cierre obligará a mandar a casa a más de 800.000 de los 2,1 millones de funcionarios federales durante el tiempo que dure la escasez de fondos y podría costar más de 1.000 millones de dólares a las arcas públicas, según la Casa Blanca. La emisión de datos económicos se interrumpirá y los parques nacionales cerrarán sus puertas, pero se mantendrán servicios básicos como el correo, el control de tráfico aéreo, los cheques de pensiones o la actividad de los agentes policiales y de seguridad.
Estos son los principales efectos de la suspensión de actividades en las principales órganos y agencias federales: 

Casa Blanca: Alrededor del 75 por ciento de los empleados de la Casa Blanca serán enviados a casa sin sueldo durante el tiempo que dure la crisis. Se espera que 436 de los 1.700 trabajadores continúen trabajando como apoyo del presidente Barack Obama.
Tesoro: Alrededor del 88 por ciento de los más de 100.000 empleados serán enviados a casa sin sueldo. Permanecerían trabajando los empleados que gestionan los desembolsos de las pensiones de seguridad social, pero no los encargados de auditorías y otras operaciones relacionadas con los impuestos en la agencia tributaria (IRS). 

- Reserva Federal: No se ve afectada por el cierre del Gobierno. 

Defensa: El 50 por ciento de los 800.000 empleados civiles del Pentágono serán enviados a casa, mientras que todos los militares -alrededor de 1,4 millones- continuarán trabajando. Obama firmó anoche una ley que permitirá que todos los militares y algunos civiles sigan recibiendo sus cheques durante el cierre del Gobierno. 

Departamento de Estado: Sus actividades no se verán inmediatamente afectadas, debido a que sus fondos provienen de una ley de gastos diferente. Las embajadas y consulados en el extranjero continuarán funcionando y se seguirán emitiendo visados para viajar a Estados Unidos. 

Seguridad Nacional: Un 14 por ciento de los más de 231.000 empleados serán enviados a casa, dado que la gran mayoría se consideran trabajadores "esenciales".
- Comercio: El 87 por ciento de sus empleados serán enviados a casa sin sueldo (más de 40.000 de los 46.420 funcionarios que trabajan allí). La división encargada de revisar las exportaciones de EE.UU. operará con la mitad del personal. 

- Trabajo: Se prescindirá del 82 por ciento de los 16.304 empleados, entre ellos los que trabajan en la Oficina de Estadísticas Laborales, que produce estadísticas económicas como los datos mensuales de desempleo. No obstante, el relativo a septiembre podría emitirse el viernes, según lo que decida la Casa Blanca. 

- Agricultura: El Departamento no ha indicado de cuántos de sus 100.000 trabajadores prescindirá, pero se espera que continúen actividades esenciales como las inspecciones de carne, al tiempo que se suspenden las de otros alimentos.
Interior: Prescindirá del 81 por ciento de sus 72.562 empleados y cerrarán todos los parques nacionales, como el Gran Cañón del Colorado, y los monumentos, como la estatua de la Libertad en Nueva York. 

Justicia: El 15 por ciento de sus 114.486 empleados serán enviados a casa. No se prescindirá de ningún agente del FBI, ni de la Agencia Estadounidense Antidrogas (DEA), ni de empleados de prisiones federales, ni de fiscales federales. 

NASA: El 97 % de sus 18.134 empleados serían enviados a casa, excepto los encargados de misiones de control relacionadas con la Estación Espacial Internacional (EEI). 

Salud: El 52 por ciento de sus 78.198 empleados dejarán sus puestos. Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades mantendrán actividades mínimas, pero no podrán llevar con normalidad su campaña anual contra la gripe. 
No obstante, los "mercados de seguros de salud" que entran hoy en vigor como parte de la reforma sanitaria de 2010 funcionarán en un principio sin restricciones. 

Transporte: Se prescindirá del 33 por ciento de los 55.468 empleados. Permanecerán en sus puestos los controladores de tráfico aéreo y algunos de los encargados del control de autopistas. 

Energía:
El 69 por ciento de los 13.814 empleados serán enviados a casa. Seguirán trabajando los encargados del control de materiales nucleares y de redes eléctricas, pero no los investigadores. 

Asuntos de Veteranos: Sólo un 4 por ciento de los 332.000 empleados de esta agencia dedicada a los veteranos de guerra resultarán afectados. 

- Vivienda: El 95 por ciento de los 8.700 empleados serán enviados a casa.